Seamos modelos para nuestras hijas e hijos
SEAMOS MODELOS PARA NUESTRAS HIJAS E HIJOS
¿Cómo aprenden los niños?
Estamos ante una circunstancia en la que los adultos adoptamos un doble papel, por un lado, tenemos que aprender nosotros mismos a gestionar esta nueva situación y, por otro lado, enseñar a los más pequeños nuevas pautas en sus rutinas.
Debemos recordar que los niños se adaptan con facilidad a las situaciones que van experimentado, pero es importante enseñarles bien y sobretodo “predicar” con el ejemplo, pues aprenden más por la observación de nuestra conducta que por nuestras palabras. Es lo que en psicología se denomina “aprendizaje observacional”.
¿En qué consiste el aprendizaje Observacional?
Podemos decir que consta de cuatro pasos:
– Atención: es la función cognitiva que nos permite percibir y comprender los sucesos
que ocurren a nuestro alrededor
– Retención: memorización o grabación del comportamiento observado
– Reproducción: ejecución de la conducta que se había memorizado
– Motivación: para los niños es más eficaz un elogio o una muestra de cariño que algo material, por ejemplo: que bien lo haces, un abrazo, eres un campeón…
Si queremos que aprendan o corrijan algún comportamiento, es importante que les expliquemos primero qué queremos que hagan, por ejemplo: “hay que lavarse las manos siguiendo estos pasos”, a continuación les mostramos como tienen que hacerlo y les pedimos
que lo repitan ellos. Este proceso requiere que primero nos paremos a pensar qué les queremos decir exactamente y en qué orden, para no generar confusión en ellos.
¿Cómo les adaptamos a esta nueva situación relacionada con el COViD?
1. Vamos a explicarles lo que ocurre, no debemos mentir a los pequeños pues pueden escuchar cosas contradictorias y eso generar cierto desconcierto en ellos dificultando su aprendizaje o provocando ansiedad. Para explicarles la situación podemos utilizar
dibujos, cuentos…
2. Establecer una nueva rutina de lunes a viernes y el fin de semana introducir algunos
cambios
3. Vamos a centrarnos en las cosas que sí pueden hacer, dándoles varias opciones. Por
ejemplo, no podemos jugar con los amiguitos pero si quieres los podemos llamar para que os contéis a que habéis jugado, podemos escribirles una carta, hacerles un dibujo…
4. Para los más pequeños, se puede intercalar el ratito de hacer las tareas con un descanso haciendo algo divertido. Por ejemplo: cuando acabes esta ficha descansamos y tú eliges a que jugar en ese descanso, después continuamos con las demás tareas.
5. Es importante que realicen actividad física pues han dejado de realizar numerosas actividades y tienen que liberar endorfinas a través de otras que sean compatibles con la situación actual. Para ello es importante que los padres y madres demos ejemplo haciéndola nosotros mismos y animándolos a que participen en forma de juegos,bailes…
¿Cómo les preparamos para salir de nuevo a la calle?
Ayer fue el primer día en que los niños y niñas salieron a la calle durante una hora por primera vez en cuarenta días, esto supone salir pero con una serie de restricciones.
Pues bien, no sólo la labor de los padres y madres es decirles antes de salir qué hay que hacer, sino que durante esa hora que estamos en la calle debemos cuidar que nosotros, como adultos y modelos de aprendizaje, cumplamos esas restricciones y, por último, al llegar a casa vamos a hablar con los niños sobre una serie de cuestiones:
1. Vamos a darles la enhorabuena por lo bien que lo han hecho
2. ¿Qué hemos hecho?
3. ¿Podemos mejorar nuestra salida para mañana?
4. ¿Cómo podemos hacerlo?
“El aprendizaje es bidireccional: nosotros aprendemos del entorno, y el entorno aprende y se modifica gracias a nuestras acciones” (A. Bandura)
Mª Ángeles Martínez Negrillo
Psicóloga Sanitaria en “Desarrollo Humano Psicología”











